Lo padeció Luisa Kuliok en "Amo y señor" y de nuevo en "Amor gitano". Encarnó al jefe de un clan difícil en "Valientes" y se ganó un lugar en la televisión entre ser "el malo" y "el galán". Pero Arnaldo André le dijo "basta para mí" a la "caja boba".
"Me encanta hacer tiras, pero tampoco es para decir 'me saqué la grande'. Lo que pasa es que ya no me da sorpresas, y cuando algo no me sorprende, me aburre", convino el actor paraguayo, que inició su carrera en Buenos Aires cuando tenía 26 años.
"No puedo asegurar que esta será mi última tira, pero lo desearía, realmente, y quiero dedicarme exclusivamente a la dirección", expresó André al diario Perfil. El actor llegó a Buenos Aires para meterse en la televisión y lo logró con papeles en novelas clásicas de Nené Cascallar y Alberto Migré antes de recalar en la fábrica de tiras de Pol-Ka.
Pero ya es tiempo de diversificarse. Por eso, André se alejó un tiempo de la pantalla chica, rodó cuatro películas en el Paraguay y volvió con más ganas de trabajar pero no de actor: "La película que voy a dirigir el año próximo es un guión que escribí basándome en un momento de mi vida, cuando tenía 11 años, que me puso frente a retos que uno debe enfrentar", adelantó.
Al mismo tiempo, André actúa en teatro junto a Soledad Fandiño en la obra "Quedate a desayunar", una experiencia que le resultó nueva aún después de 30 años de carrera: "Yo nunca hice televisión y teatro al mismo tiempo, salvo en la época de Alberto Migré y sus telenovelas, que salía de gira", explicó.
"Pero hago el esfuerzo porque no quise perderme la posibilidad de disfrutar una obra que me hace muy feliz", comentó, a pesar de que le queda poco tiempo entre las seis horas de grabación en la tele y varias de ensayo en teatro.
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