Los integrantes de la fuerza custodiaban el lugar luego que el sabado pasado, por orden del juez federal de Quilmes, Luis Armella, dieran la orden de desalojar los terrenos.
El hecho ocurrió en la calle Olazábal al 4500, en donde se encuentra un predio de 40 hectáreas que estaba destinado para construir una planta de efluentes para el plan de saneamiento del Riachuelo.
Fuentes judiciales informaron a Infobae.com que "hoy intentaron reingresar al predio y hubo disparos hiriendo a los gendarmes".
Las cuatro personas fueron trasladadas de urgencia con heridas al Hospital Evita y luego tres de ellas fueron derivadas al Churruca, aunque todos están fuera de peligro.
La doctora María del Carmen Vivera, directora del Hosopital Evita, explicó que los cuatro efectivos llegaron cerca de las 16. Tres de ellos tenían heridas de bala y el cuarto sólo presentaba traumatismos leves.
Según contó, los tres efectivos con impactos fueron trasladados por helicópteros al Hospital Churruca, en donde se encuentran ahora internados fuera de peligro, explicó la doctora en Radio 10.
Pablo Lavenir, vocero de la Gendarmería, informó que tras el ataque tomó intervención la Justicia. “La agresión llegó por uno de los laterales, pero no es algo común de lo que estamos viviendo. Hacía más de tres años que estábamos acá”, declaró. El personal de la Gendarmería no contaba con armas letales, aclaró el funcionario, por lo que descartó la posibilidad de un enfrentamiento.
Los agentes de la fuerza y los vecinos ya habían denunciado que por las noches los gendarmes eran atacados con "botellazos" y piedrazos por vecinos de la zona que residen en una villa de emergencia.
Si bien aún no se determinó el origen de los disparos, las primeras sospechas apuntan a ese barrio carenciado, en donde vivirían la mayoría de las familias que días atrás intentaron ocupar el lugar.
Infobae-
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